Hoy me he dado cuenta de lo rápido que están pasando los días y de que ya llevo un mes y dos semanas aquí, pero así es el ritmo de esta ciudad. Ya puedo confirmar que lo que mueve a Hong Kong y a su gente es el dinero, mejor dicho el DINERO, y eso no se consigue estado tumbado, ¿ o sí?.
Dando una vuelta por el Soho nos hemos encontrado con este sitio de ensaladas y sólo ver cómo las preparaban me ha costado 70 HKD (casi 7€) y es que no he podido evitar pedirme una :)
Más tarde, caminando por algunos callejones de Sheung Wan hemos visto lo que cambia esta zona por la noche cuando ya todo está cerrado. Lo que durante el día es un completo alboroto entre tiendas, mercados, gente y taxis, por la noche se convierte en un tranquilo y oscuro barrio donde puedes encontrar algunas situaciones como un señor pintando en la puerta de su pequeña galería, alguna tienda de segunda mano que todavía sigue abierta, los dueños en las puertas de sus negocios quemando no se qué tipo de papel con el que piden fortuna o un grupo de gente haciendo una barbacoa en plena calle, por cierto muy amables, nos han invitado a comer algo de carne y uno de ellos nos ha enseñado la tienda en la que trabaja que estaba justo detrás y nos ha encantado. Ya nos hemos agregado en facebook para estar en contacto!
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