Instalada!

Ya puedo decir que estoy viviendo en esta ciudad!

Después de un largo viaje por fin llegué al aeropuerto de Hong Kong, situado en Lantau Island, la segunda isla más grande entre las 234 que forman el archipiélago. Fue realizado sobre un terreno ganado al mar y es obra del arquitecto Norman Foster.

Apenas me acababa de sentar en el metro en dirección a Hong Kong Island cuando empecé a ver enormes edificios de viviendas que parecían interminables, a un lado y al otro, y cada vez más. La primera impresión sin duda me dejo boquiabierta, y la verdad es que ya había visto imágenes donde aparecían este tipo de edificios pero verlo en persona fue alucinante. Hice un par de videos que espero subir un día de estos!

La residencia no es gran cosa pero lo importante es que está bastante limpia y las chicas con las que comparto la habitación, dos alemanas, son muy simpáticas. Cuando estamos en la habitación es imprescindible tener el aire acondicionado encendido, pues la temperatura es de 30 grados, que no es para tanto, pero es que hay una humedad de más del 80% y entre eso y la lluvia que cae por estas fechas, te pasas el día empapado!

Hoy he empezado dando un paseo por el Soho. Durante el día está lleno de mercados en las calles con puestos de pescados (tan frescos como que están vivos) y fruta, sobretodo, y lo que más me ha llamado la atención es que, entre tanto caos, hay también muchos negocios en las plantas bajas de los edificios que son muy originales y parece que sus propietarios han cuidado hasta el mínimo detalle. Sin embargo, el resto de la fachada muchas veces está deteriorada y llena de instalaciones de aire acondicionado, pero nunca dejas de ver algún rascacielos de vidrio al fondo y se crea un auténtico contraste.

Luego he pasado por las escaleras mecánicas del Central Mid Levels, las más largas del mundo y que realmente se agradecen ya que las calles en esta zona tienen mucha pendiente.

De ahí he llegado a Central District donde he visto que salían continuamente Ferrys hacia Kowloon y he pensado, ¿por qué no? Por tan sólo 30 céntimos he podido cruzar el Victoria Harbor y llegar al otro lado, donde se encuentra el distrito Tsim Sha Tsui, repleto de bares, restaurantes de comida rápida, tiendas de electrónica, herboristerías, moda…pero sobretodo, gente. Gente por todas partes mezclada con todo tipo de ruidos y olores que me han producido sensaciones completamente nuevas.

En cuanto a los hongkoneses, tengo que decir que por lo general me han parecido muy amables y atentos en todo momento. En fin, qué más no puedo pedir!

Al final se me ha hecho un poco tarde y la verdad es que he acabado reventada así que mañana será otro día, y ya os iré contando!

En Flickr hay más fotos!

Y lo más importante, muchísimas gracias a todos los que habéis comentado o habéis puesto un ‘Me gusta’ en Facebook jeje :)